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Los Maníacos de Dnepropetrovsk es el nombre que los medios han dado a los asesinos responsables de una serie de asesinatos en Dnepropetrovsk , Ucrania en junio y julio de 2007. El caso ha ganado notoriedad debido a las grabaciones de algunos de los asesinatos, que fueron subidas a Internet. Dos varones de 19 años, Viktor Sayenko y Igor Suprunyuck fueron arrestados con cargos de 21 asesinatos. Un tercer cómplice, Alexander Hanzha, fue acusado de dos robos a mano armada que tuvieron lugar antes de los asesinatos. El once de febrero del 2009, los tres acusados fueron declarados culpables. Suprunyuck y Sayenko fueron sentenciados a cárcel de por vida, Hanzha recibió 9 años de prisión. Los abogados de Suprunyuck y Sayenko declararon que recurrirían a una apelación.

Los dos primeros asesinatos tuvieron lugar la noche del 25 de junio del 2007. La primera víctima fue Ekaterina Ilchenko, una mujer de 33 años que se dirigía a su casa después de tomar un té con su pareja. Según la confesión de Sayenko, él y Supruyuck habían "salido a pasear". Supruyuck tenía un martilo. Suprunyuck golpeó a Ilchenko en un costado de la cabeza. El cuerpo de ella fue encontrado por su madre a las 5 AM.

Tras una hora del primer asesinato, los dos chicos atacaron a su siguiente víctima, Roman Tatarevich. Él dormía en un banco cerca de la escena del primer asesinato. La cabeza de Tatarevich fue brutal y repetidamente golpeada con objetos contundentes, su cara quedó irreconocible.

El 1 de julio, dos víctimas más, Evgeniya Grischenko y Nikolai Serchuk, fueron encontrados asesinados en la ciudad vecina Novomoskovsk

La noche del 6 de julio, tres personas más fueron asesinadas en Dnepropetrovsk. La primera fue Egor Nechvoloda, un militar recientemente licenciado, que fue golpeado hasta la muerte cuando volvía a casa después de haber estado en un club nocturno. Su madre encontró el cuerpo por la mañana cerca del edificio de apartamentos en la Calle Bohdan Khmelnystsky. Elena Shram, una guardia nocturna de 28 años, fue asesinada cerca de una esquina en la calle Kosiora

Según la confesión de Sayenko, Shram caminó hacia ellos, Suprunyuck le golpeó varias veces con el martillo que había escondido bajo su camiseta, hasta que ella cayó al suelo. Ella llevaba una bolsa con ropa, Suprunyuck cogió la bolsa y extrajo y utilizó esa ropa para limpiar el martillo. Luego tiró la bolsa.

Esa misma noche, mataron a una mujer llamada Valentina Hanzha (sin relación aparente con Alexander Hanzha).

Al día siguiente, 7 de julio, dos chicos de 14 años, del pueblo vecino Podgorodnye, fueron atacados a la luz del día mientras pescaban. Uno de los dos, Andrei Sidyuck, fue asesinado, pero el otro, Vadim Lyakhov, consiguió escapar.

El 12 de julio, un hombre de 48 años llamado Sergei Yatzenko, desapareció cuando iba con su moto Dnepr. Su cuerpo fue encontrado cuatro días después, mostrando claras señales de un ataque salvaje.

Treinta asesinatos más siguieron a éstos, a menudo con múltiples cuerpos encontrados el mismo día. Al parecer, todas las víctimas fueron elegidas al azar. Aunque procuraban ir hacia las más vulnerables en apariencia: mujeres, niños, ancianos, vagabundos o personas ebrias.

La mayoría de las víctimas fueron asesinadas con objetos contundentes como martillos y barras de acero. Golpeaban a la cara, quedando las víctimas irreconocibles. Muchas víctimas fueron torturadas y mutiladas. No hubo agresión sexual en ninguno de los casos. En algunos casos, robaron a sus víctimas el teléfono móvil y otras pertenencias con tal de venderlas a casas de empeño, pero no lo hacían por sistema.

Los asesinatos se extendieron en un amplio radio. Además de la ciudad de Dnepropetrovsk, algunos tuvieron lugar en las áreas de Dnipropetrovsk Oblast.

No se relacionaron los asesinatos que se perpetraron hasta el 7 de julio con el ataque a los dos chicos en Podgorodnoye. Vadim Lyakhov, el superviviente, fue inicialmente puesto bajo arresto, sospechoso de haber asesinado a su amigo. No se le permitió pedir un abogado y fue golpeado por la policía durante el interrogatorio. En cualquier caso, se averiguó rápidamente que él no era el responsable de la muerte de su amigo, y que ese asesinato estaba conectado con la reciente masacre. Lyakhov cooperó con la policía para crear retratos robot de los atacantes.

Varios días después, el 14 de julio, una mujer de 45 años llamada Natalia Mamarchuck estaba conduciendo su scooter en el pueblo vecino de Diyovka. Cuando pasaba por una zona arbolada, dos hombres corrieron hacia ella y la tumbaron. Entonces cogieron un arma contundente, posiblemente un martillo o una tubería, y la golpearon hasta la muerte cuando ella estaba en el suelo. Cuando dejó de moverse, los hombres se subieron a la scooter y huyeron. El ataque fue visto a cierta distancia por varias personas del lugar. Los persiguieron, pero rápidamente perdieron la pista de los atacantes. Dos niños vieron también el ataque desde cerca, escondidos a unos metros de donde Mamarchuk fue asesinada. Ellos dieron una detallada descripción que coincidía con la que había dado Lyakhov previamente. Un grupo de investigación fue rápidamente creado en Kiev, capitaneado por el investigador criminal Vasily Paskalov. Unos 2,000 investigadores trabajaron en el caso.

En un principio la investigación fue llevada en secreto. Sin información oficial acerca de los asesinatos y la gente no fue avisada sobre posibles ataques ni tampoco se les informó de las descripciones de los sospechosos. Aún así, los rumores de los asesinatos mantuvieron a mucha gente en sus casas por las noches. Los investigadores distribuyeron selectivamente retratos de los sospechosos y listas de propiedades robadas a las casas de empeño locales. Las propiedades robadas comenzaron a aparecer en las casas de empeño de la ciudad del distrito Leninskiy. La combinación de los retratos y las propiedades robadas encontradas guiaron a las autoridades hasta los sospechosos.

Los tres sospechosos fueron arrestados el 23 de julio del 2007. Suprunyuck quiso vender un móvil robado a una de las víctimas en una casa de empeños local, pedía 150 hryvnia (unos 13 euros). Cuando encendió el móvil para mostrar que funcionaba, su localización fue rastrada por los agentes de la ley. Suprunyuck y Sayenko fueron arrestados junto a la caja registradora de la tienda. Hanzha fue arrestado en su hogar, intentaba deshacerse de los teléfonos tirándolos por el inodoro. Los móviles pudieron ser recuperados, pero toda la información que pudo haber en ellos se perdió.

Los tres fueron acusados de estar envueltos en 29 incidentes distintos, incluyendo 21 asesinatos y 8 ataques en los que las víctimas sobrevivieron. Suprunyuck fue acusado de 27 de los casos, incluyendo los 21 asesinatos en primer grado, 8 robos a mano armada y 1 delito de maltrato animal. Sayenko fue acusado de 25 cargos, incluyendo 18 asesinatos, 5 robos y 1 cargo de maltrato animal. Hanzha fue acusado de 2 casos de robo a mano armada, deducidos del 1 de marzo del 2007, el incidente en Dniprodzezhynsk.

Los tres confesaron rápidamente, aunque Suprunyuck retiró su confesión más tarde. Su juicio comenzó en junio del 2008. Suprunyuck se declaró no culpable, los otros dos sospechosos se declararon culpables de todos los cargos. Viktor Chevguz, el abogado defensor de Suprunyuck, abandonó el caso tras declarar que se había visto disgustado por no haberse aceptado el alegato de demencia para su cliente. Los abogados de las familias de las víctimas argumentaron que el nivel de cuidados tomados por los asesinos durante su serie de crímenes, era una muestra de que ellos eran totalmente conscientes de sus acciones.

El que mal comienza mal acaba, pero en mi pusto de vista el castigo que les dieron no fue nada ejemplar, en mi pais si robas un mendrugo de pan = Justicia comunitaria = The matan a palos. Y esos tipejos que mataron de forma tan cruel a tanta gente los dejan con vida para supuestamente "arrepentirse de todo lo que hicieron" HA, que humanidad